Cada pieza está hecha a mano con dedicación y materiales de alta calidad, por eso merece un cuidado especial para acompañarte por mucho tiempo.
1. Guárdalas con cariño: mantenlas en su bolsita o caja individual para protegerlas de golpes y roces.
2. Evita el agua y químicos: quítatelas antes de lavarte las manos, ducharte, nadar o aplicar perfumes, cremas o sprays.
3. Úsalas como toque final: póntelas al terminar de vestirte, idealmente terminado tu cuidado de la piel, maquillaje y perfume.
4. Limpieza suave: basta con un paño seco y delicado para mantener su brillo.
Recuerda que cada pieza es única: pequeñas variaciones en color o forma son parte de su encanto artesanal ✨
Con estos cuidados, tus joyas seguirán siendo pequeñas obras de arte que celebran tu estilo y personalidad.
